lunes, 25 de abril de 2011

Encontrando la PAZ



Hoy mis pupilas no están en esta ruta por la que viajo, me las robó un grupo de estrellas que abrazaban la noche. Se fueron a pensar, se fueron a pasear o simplemente se dejaron llevar.

Mi mirada distante de mí, quiere llegar a un lugar donde reposar, parece buscar cierta paz para volver a mirar.

En un parpadear el paisaje vuelve a cambiar. Mis pupilas contemplan la inmensidad y saben que aquí hallaron la paz.

No sólo mis ojos se encuentran en calma, sino que cada parte de mi ser encierra una dulce armonía.

Los problemas se muestran difusos y distantes desde aquí como la línea del horizonte cuando cae el sol en la montaña anunciando la llegada del atardecer.
Aunque tenga que volver a mirar paisajes urbanos llenos de rutina, mis ojos guardan en su retina la paz que encuentran cada vez que visitan este lugar.



NP